Desde el Centro L’amor nos parece fundamental acercar el conocimiento científico a la población general de una forma cercana y comprensible para todas las personas. Por ello, hemos creado un podcast donde abordaremos diferentes temáticas de interés relacionados con las demandas que habitualmente atendemos en nuestra consulta.
Para ello hemos contado con la participación de las dos alumnas de practicas que nos han acompañados durante los últimos cuatro meses. Encontrándose estas realizando el último curso del Grado de Psicología en la Universidad del País vasco. Durante este tiempo han trabajado duro y adquirido muchos conocimientos a cerca del ejercicio profesional del psicólogo.
Hemos grabado un total de 10 episodios de corta duración pero con información de interés, estos fueron grabados durante el estado de alarma por lo que se hará referencia a esta situación en varios de ellos. Subiremos 2 episodias al mes, haciendo un descanso durante el mes de agosto. Así que si te gusta este tipo de contenido, te ánimo a que suscribas para que te avise cuando subamos el siguiente episodio.
A continuación puedes escuchar el primer episodio en este caso Angela Linares nos habla sobre la fatiga pandémica y la gestión emocional.
Fatiga pandémica y gestión emocional
En este episodio guiado por Zuriñe Salgado, Angela Linares Psicóloga General sanitaria experta en Mindfulness y gestión emocional del Centro L’amor nos habla sobre cómo nos esta afectando la situación de las medidas sanitarias por el Covid-19 a nivel psicológico.
Podcast transcrito
Llevamos más de un año con esta situación de pandemia y durante este tipo muchas personas están padeciendo o han padecido fatiga pandémica, ¿qué es exactamente y qué causa este tipo de fatiga?
«La OMS describe este término como “la desmotivación y el cansancio” que la población siente ante la situación prolongada de pandemia y todas sus restricciones, que esto hace que haya una relajación en las medidas de protección frente al virus.
Para entenderlo mejor, tenemos que hablar del estrés; el estrés es un mecanismo de defensa que se pone en marcha cuando una persona se ve envuelta por muchas situaciones que superan sus recursos. Es un sentimiento de tensión física o emocional natural que nos permite llevar a cabo las actividades de forma más lúcida.
El problema con la pandemia es que el estrés está siendo continuo y no resuelto, es decir, llevamos más de un año haciendo frente a una adversidad que parece que no acaba nunca y esto es lo que provoca esa fatiga pandémica. Y, cuanta más fatiga hay, mas cansancio y mas emociones negativas o desagradables se sienten y más necesitamos relajarnos y desconectar de todo….es la pescadilla que se muerde la cola, la verdad. «
¿Puede derivar en desarrollar otro tipo de problemas?
«Sí, de hecho, los datos revelan que toda esta situación está haciendo que las consultas por salud mental aumenten. A groso modo se ha aumentado el numero de consumo de antidepresivos y ansiolíticos en la población, lo que refleja problemas de ansiedad y depresión, pero también se empieza a observar un aumento en el abuso de sustancias fomentado por el aburrimiento y agotamiento de la situación, y en general hay aumento de emociones negativas como la ira, la rabia, la incertidumbre… que si no son bien gestionadas pueden derivar en problemas como trastornos depresivos o trastorno de ansiedad generalizada, por ejemplo.
Por otra parte, se ha observado también que la proximidad a eventos que amenazan la vida y la supervivencia como es en este caso la enfermedad por coronavirus, puede precipitar al desarrollo del Trastorno de Estrés Post Traumático, o incluso pueden aparecer duelos enquistados, o desarrollar un trastorno obsesivo-compulsivo, entre otros.
En definitiva, esta pandemia nos está dejando muchos efectos psicológicos, directos o indirectos de la enfermedad que nos están afectando ahora, pero que también pueden afectarnos en un futuro, y esto hace que se esté generando una necesidad de descubrir, evaluar y refinar las intervenciones para abordar todos esos aspectos psicológicos.»
Es algo que afecta exclusivamente a los adultos, ¿o también puede afectar en niños y niñas?
«Si claro, es algo que nos está afectando a todos y de hecho se está observando que los mismos síntomas que sufrimos los adultos pueden aparecer en los niños. Al final todos sufrimos las restricciones y las consecuencias derivadas de la pandemia. Y a los niños les afecta de igual manera. Pero también se ha visto que dándoles las explicaciones adecuadas y ofreciéndoles información, adaptada a su nivel claro, esos síntomas mejoran notablemente. Los niños además de resilientes son muy valientes.
Por eso hay que enseñarles también estrategias que puedan utilizar cuando lo necesiten y atender a las demandas emocionales que tengan. «
Hoy en día nos llega muchísima información, es algo que tenemos muy accesible, ¿cómo podemos manejar toda la información que nos llega para que no nos afecte de manera negativa?
«Bueno algo positivo de esta fatiga pandémica es que nos lleva a realizar un menor esfuerzo por mantenernos informados, pero aún así yo creo que hay que limitar el consumo de noticias y de contenidos que nos agotan o nos enfadan, porque demasiada información sobrecarga nuestras emociones negativas y terminan agotando nuestra energía. Entonces, sería conveniente leer o escuchar noticias solo un par de veces al día, por ejemplo y el resto del día dedicarse a otras cosas.
También limitar el tiempo del que hablamos del coronavirus, es decir, en las conversaciones sociales con amigos, familia o compañeros, en el trabajo… sería conveniente no hablar permanentemente del tema, entonces se puede limitar también el tiempo de conversación sobre ese tema.
Y, por supuesto, el saber contrastar las noticas que vemos porque actualmente con las redes sociales se pueden difundir bulos haciendo que se cree un pánico innecesario.»
¿Cómo podemos regular nuestras emociones?, ¿hay técnicas específicas o actividades concretas que nos podrían ayudar?
Sería buena la práctica de mindfulness, es decir, disfrutar y valorar el momento que estás viviendo y evitar anticiparse al futuro, que es en gran parte lo que genera esa gran ansiedad, centrarnos en pequeñas cosas y concentrarnos en el futuro más inmediato; es decir, qué haremos mañana o qué podemos hacer hoy que nos distraiga. Puede ser una forma útil de lidiar con toda esta incertidumbre.
Otra técnica puede ser cuestionarse los pensamientos, ya que al fin y al cabo nos sentimos como pensamos y muchas veces nos equivocamos a la hora de pensar, como cuando pensamos que algo va a suceder y al final no es así. Son pensamientos erróneos que pueden producir malestar. Por lo tanto, es importante preguntarte si eso que estás pensando es una verdad absoluta o puede haber otras explicaciones. Por ejemplo, actualmente nos resfriamos y ya pensamos que tenemos Covid-19 y puede que no sea así, entonces siempre hay que cuestionarse, no creer todo lo que piensas porque puede ser que ese pensamiento nos lleve a lo peor, y eso nos genera muchas emociones negativas.
Si te sientes identificado con lo comentado en el podcast o te gustaría trabajar algún aspecto relacionado con la ansiedad, el estrés o algún miedo.